En Uruguay si visitamos la zona balnearia, vemos numerosos ejemplos de colectores solares térmicos instalados en casas de veraneo.
En Montevideo casi todos los proveedores de equipos tienen sus locales de venta en la zona residencial costera, la de mayor poder adquisitivo y donde también vemos la mayoría de las instalaciones.
En otros centros urbanos encontramos equipos solares mayormente en las zonas centrales y principalmente asociados a hoteles y otras instalaciones mandatadas a instalarlos por la "Ley Solar" (Ley Nº18585).
En las zonas rurales, los vemos generalmente en las casas principales de los establecimietos, y casi nunca en otras.
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| Casas Mevir |
Así, en Uruguay los sistemas solares se han desarrollado mas que nada como un equipamiento elitista al que la mayoría de la población ve mas como una excentricidad cara, que como algo cuya instalación podría ser en su propio beneficio.Asimismo, para aquellos que lo reconocen como útil, el tema de los costos iniciales hace que no lo vean como una posibilidad cierta.
Hace tiempo que aparecen en los medios notas sobre la posibilidad de financiaciónpara las instalaciones solares térmicas domiciliarias por parte del Banco Hipotecario del Uruguay, e incluso la empresa eléctrica UTE, a la cual una masiva instalación de esos sistemas le podría permitir diferir inversiones en generación.
Mientras tanto, se planifican y construyen cientos e incluso miles de viviendas por parte de sistemas cooperativos e incluso viviendas "sociales" con apoyo financiero del estado. Salvo algunas excepciones, esas construcciones ni siquiera tienen prevista la instalación de istemas solares en su diseño.
Sería deseable poder hacer que los compatriotas que habitarán, especialmente las viviendas sociales, cuenten desde el comienzo, con sistemas solares instalados. Sin embargo, eso incrementa el costo inicial de la vivienda y generaría un tratamiento diferencial con los que acceden a su vivienda por sus propios medios.
En mi experiencia, el mayor costo del sistema solar no es el sistema en si mismo, cuyo costo podría ser aún menor si se reduce la carga impositiva que aún se le aplica, sino el costo de adaptar la instalación sanitaria existente al sistema solar. |
| Panel en patio, ideal techo liviano |
Ese costo es casi nulo si se hace la previsión de la instalación solar durante la construcción o reforma de la vivienda, así lo que debiera hacerse es que TODAS las nuevas viviendas esten preparadas para la futura instalación de los equipos solares.
Eso es tan simple como acondicionar que antes de ingresar la conexión de agua fría al sistema de calentamiento, posiblemente un termotanque eléctrico, salga el caño fuera de la vivienda y vuelva a ingresar. Mientras no se tiene el equipo solar, una conexión flexible tipo "colilla" mantiene el pasaje de agua.
La instalación se facilita por el hecho de que la mayoría de los planos de viviendas "económicas" centralizan las instalaciones sanitarias en una sola pared compartida por el baño y la cocina.
Una acción tan simple como esta posibilitará que incluso los usuarios de viviendas sociales vean facilitado el acceso a la tecnología solar térmica y al uso eficaz de la enegía que el sol entrega sin mayor costo en los techos e incluso patios o espacios abiertos.
